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El Marketing Político en redes sociales o Marketing Político Digital tiene el poder de convertir a simples ciudadanos en amigos, a amigos en seguidores y a seguidores en votos. Es por eso que es esencial desarrollar estrategias de Marketing Político Digital para lograr campañas exitosas y ganadoras.
Campañas ganadoras, campañas digitales
En la actualidad, resulta impensable llevar a cabo una campaña política sin el uso de las redes sociales como una herramienta esencial en la estrategia táctica y estratégica en las elecciones. El creciente uso de Internet y el aumento considerable del tiempo que los ciudadanos digitales pasan en línea, hacen que estén expuestos al mensaje político de manera constante.
En la publicación Marketing Político Digital ¿Qué es? puedes leer más detalles sobre este escenario digital.
Los ya nombrados “Outsider” en la política han emergido tras el bastión de las plataformas digitales como su método vertebral de comunicación. Hitos históricos se han marcado desde las campañas de Obama, el Brexit, Donald Trump, Nayib Bukele, entre otros.
Algunos elementos digitales han sido fundamentales en estrategias políticas, como la inteligencia artificial aplicada a la comunicación política y la masificación de los algoritmos en las plataformas. En el escenario político actual, las redes sociales han jugado un papel fundamental para acercar al ciudadano digital al candidato y al gobierno. El éxito de las campañas electorales modernas se debe en gran parte a estrategias bien ejecutadas en el ámbito digital, que se complementan con las estrategias tradicionales en el terreno. Es por eso que una campaña ganadora debe contar con un equipo profesional que ejecute estrategias de Marketing Político Digital en las redes sociales.
Aquí conoceremos las 10 claves que se deben tener para ejecutar una campaña exitosa de Marketing Político Digital en redes sociales.
Clave 1: Investigación y Análisis
El análisis y la investigación son fundamentales para comenzar una estrategia de Marketing Político Digital. Es importante contar con una base sólida que respalde nuestras acciones tácticas en el ámbito digital y nos permita alcanzar resultados electorales exitosos.
Para lograr esto, es necesario contar con varios elementos que nos ayuden a estructurar una estrategia sólida. Es crucial reconocer los elementos internos de la campaña, como el inventario y el diagnóstico inicial. Además, debemos identificar los arquetipos de nuestro candidato y conocer sus fortalezas, debilidades y amenazas.
El estudio minucioso de la correlación de fuerzas que rodean la campaña también es fundamental. Detectar al candidato opositor y realizar un benchmarking político nos ayudará a definir posibles puntos de contraste. Asimismo, a través del análisis de audiencias digitales, debemos identificar cuál es la conversación más relevante a nivel local, regional y nacional.
Estos términos clave que generan emociones en el elector activo digitalmente son de vital importancia. Las encuestas, tanto en terreno como digitales, también nos ayudarán a construir escenarios de participación que nos permitan tener una base sólida.
En resumen, esta primera etapa es crucial y depende en gran medida del consultor o estratega, de la visión del equipo y de la proyección. Lo que está claro es que sin un análisis previo no es posible construir una estrategia ganadora en el Marketing Político Digital.
El exhaustivo estudio de la interacción de las fuerzas que rodean la campaña es esencial.
Identificar al candidato opositor y establecer un análisis comparativo político es fundamental para determinar posibles áreas de contraste. Además, a través del análisis de las audiencias digitales, es necesario identificar cuál es la conversación predominante a nivel local, regional y nacional.
Se trata de esa amplia gama de términos que despiertan emociones en el elector activo digitalmente.
Las encuestas, tanto en terreno como digitales, también nos ayudan a crear escenarios de participación que allanan el camino hacia el éxito.
Esta primera etapa implica varios elementos y depende en gran medida del consultor o estratega, de la visión del equipo y de la proyección. Sin embargo, es evidente que sin un análisis previo no es posible comenzar a construir una estrategia ganadora.
Clave 2: Estructura la estrategia
Una vez que tengamos una visión clara del panorama, podremos determinar el camino que la campaña política debe seguir en el ámbito digital, y es en este punto donde debemos comenzar a construir una estrategia que esté alineada con la estrategia general de la campaña.
Es fundamental establecer una sinergia en los diferentes escenarios de la campaña electoral. Para estructurar la estrategia, es prudente definir etapas que nos permitan establecer puntos de acción, los cuales pueden formar parte de la construcción del posicionamiento, los enfoques clave y la influencia del coeficiente electoral, los cuales se explicarán con más detalle al final de este artículo.
Es crucial definir objetivos estratégicos que sean tanto cuantitativos como cualitativos. Estos objetivos deben estar alineados con las acciones tácticas que, a su vez, construirán la dirección de la estrategia digital. Además, la estrategia debe contar con indicadores que permitan medir las acciones, realizar correcciones y reestructurar según sea necesario.
Un error común es convertir la estrategia digital en un modelo reactivo que responda únicamente a las circunstancias de la elección. El entorno digital es altamente dinámico, y si no hay una estrategia bien fundamentada, existe el riesgo de perderse reaccionando ante la oposición, defendiendo o blindándose. Por lo tanto, es fundamental definir una estrategia sólida para construir una campaña ganadora en el ámbito del Marketing Político Digital.
Clave 3: Define los objetivos
Como mencioné previamente, los objetivos en una estrategia digital pueden ser tanto cuantitativos como cualitativos.
El espacio de la estrategia digital nos permite adaptar cada objetivo en función de las metas que tengamos en la estrategia digital. Cada objetivo debe estar enfocado en contribuir a la meta final con el propósito de medirlo.
Un ejemplo claro de la definición de objetivos en el marco de la estrategia es tener un número específico de personas impactadas, ya sea relacionadas con la meta electoral o simplemente respondiendo al número de ciudadanos activos en la localidad.
No podemos alcanzar el resultado estratégico sin objetivos, ya que estos son los que lo alimentan. Además, los objetivos nos permiten crear tácticas que enriquecen la ejecución de todas las acciones digitales.
Tener objetivos es fundamental para coordinar al equipo digital, darles dirección a las etapas y cumplir con la estrategia digital.
Clave 4: Ecosistema Digital
Una vez que se tenga clara una estrategia de Marketing Político Digital con sus objetivos estructurados, se debe construir el ecosistema digital. Esto incluye investigar dónde está nuestro votante y en qué plataformas participa. En muchos casos, ya se cuenta con un ecosistema base, pero este debe diagnosticarse y optimizarse según la estrategia. El ecosistema digital político se refiere a los canales, herramientas y tecnologías con las que cuenta el equipo digital para ejecutar la estrategia. Es importante entender que cada canal tiene su propio estilo y formato, y debemos contar con el equipo adecuado para atender cada espacio del ecosistema. Además, el ecosistema político digital debe estar alineado con la estrategia general de la campaña.
Clave 5: Equipo de campaña
Una estrategia bien estructurada, presupuesto definido, todo articulado, pero al momento de la ejecución surgen falencias. esto es realmente común en las campañas políticas, pues quienes terminan ejecutando la estrategia son los conocidos sobrinitysmanager😀, alguien cercano a la campaña pero sin experiencia o conocimiento.
Es muy importante definir un equipo sólido, para establecer los roles que se van a asignar al momento de ejecutar la estrategia. Como en la guerra, cada miembro del frente de batalla, cumple un papel determinante, en las elecciones también.
Como lo dijo Sun Tzu en el Arte de la Guerra, “La victoria usualmente va al ejército cuyos oficiales y soldados están mejor entrenados”.
Sun Tzu
Además, es un libro obligado de todo estratega digital y también hace parte de la lista de los consultores políticos. Un equipo formado, cualificado, con entrenamiento constante sobre los principales aspectos de la contienda, es valioso puedan dar una tercera visión desde su ejercicio práctico, a las acciones que se emprendan.
Clave 6: Sensor ciudadano
Desde el inicio, es fundamental estar constantemente evaluando el sentir de los ciudadanos: qué piensan, qué sienten, qué opinan, qué les preocupa. Para llevar a cabo esta interpretación, podemos utilizar herramientas tecnológicas que incorporen inteligencia artificial.
Además, también podemos explorar paneles de estadísticas y construcción de audiencias para identificar nuestras propias comunidades.
Es importante mantener una escucha activa en el entorno digital, configurando alertas para estar preparados ante cualquier situación imprevista.
Contar con un plan de crisis nos permite tener el control de los daños en caso de un ataque por parte de los competidores. Abrir vías de comunicación en las que los ciudadanos puedan expresar su opinión también es crucial, ya que esto nos ayudará a nutrir el futuro plan de gobierno.
La campaña digital también debe estar al tanto de las encuestas realizadas en el terreno, interpretarlas y extrapolarlas al ámbito online. Es fundamental escuchar los medios de comunicación en los escenarios digitales.
Incluso debemos prestar atención a los bots y reconocerlos para detectar posibles centros de ataque que puedan surgir. La organización de los mensajes ciudadanos nos permitirá identificar posibles tendencias que puedan impactar positiva o negativamente en nuestra campaña.
El sensor ciudadano siempre debe estar midiendo el clima electoral, las palabras asociadas a argumentos, necesidades o reclamos de los electores.
Clave 7: Huella de coeficiente electoral
A medida que navegamos por internet, dejamos una huella digital que alimenta las redes neuronales y crea una identidad única para cada uno de nosotros. Esta identidad revela información sobre nuestra ubicación geográfica, el tipo de dispositivo que usamos y nuestros intereses y gustos.
Esta huella digital se convierte en un perfil que puede ser identificado en el escenario digital, lo cual es fundamental para segmentar a nuestro electorado. Contar con herramientas que nos permitan identificar estas huellas digitales y rastrear la actividad en masa de nuestros votantes es clave.
Por supuesto, todo esto se realiza con el consentimiento del ciudadano digital, quien acepta ser rastreado dentro de los límites de la política de privacidad. Reconocer que todos dejamos una huella digital y aprovechar las herramientas disponibles es realmente necesario.
Además, muchas redes sociales ya realizan esta actividad por nosotros, por lo que simplemente debemos procesar los datos que generan y construir nuestros enfoques en base a ellos.
Clave 8: Nodos de enfoque
Aprovechando la clave anterior, podemos construir los nodos de enfoque que nos permitirán estructurar mensajes clave que lleven al elector a reconocer nuestra marca política.
Estos nodos de enfoque son estructuras de información de las huellas del coeficiente electoral a las que podemos proporcionar información relevante para ellos. Es similar a cuando un candidato tiene un desayuno con empresarios y presenta propuestas que les interesan, o cuando se reúne exclusivamente con maestros para discutir políticas educativas.
De la misma manera, en estos Nodos de Enfoque, podemos acercarnos aún más al elector en nuestra campaña. La similitud entre nuestro mensaje y el interés del ciudadano digital genera una conexión que puede lograr una conversión significativa para nuestros objetivos electorales.
No se trata solo de difundir un mensaje aprovechando el alcance de las redes sociales, sino de acertar con ese mensaje y lograr convertirlo en un voluntario digital potencial o incluso en miembros activos de nuestro equipo.
Esta conversión sin duda es medible y puede resultar en un crecimiento exponencial de los resultados de la campaña.
Clave 9: Atribución de presupuesto
En esencia, siempre las campañas políticas dan prioridad a otros gastos, como la publicidad en medios tradicionales o la organización de eventos masivos, que también son relevantes pero que en el ámbito digital se pueden potenciar de manera más efectiva. Por ello, es fundamental tener un modelo de atribución del presupuesto que se ajuste a las etapas en las que se encuentra la campaña.
Reconocer cuándo, dónde y cómo invertir el presupuesto nos permite tener una aplicación fundamentada de los recursos económicos. Los modelos de atribución pueden establecerse considerando el potencial de cada red social, el valor que aporta cada plataforma o la etapa específica en la que se esté ejecutando la estrategia digital.
Además, los modelos de atribución también pueden definirse en función de los objetivos cuantitativos que se establecieron previamente. Por ejemplo, si el objetivo es aumentar el número de seguidores en redes sociales, se puede destinar un mayor presupuesto a la promoción de contenidos en esas plataformas.
Es importante tener un presupuesto específico para el setup de herramientas extras que se van a adquirir. Esto incluye software especializado, herramientas de medición de resultados, herramientas de escucha digital, automatización de procesos, entre otras. Destinar un presupuesto para estas herramientas es clave para optimizar la estrategia y obtener mejores resultados.
Asimismo, es necesario designar un presupuesto para posibles ataques o defensas controladas que puedan surgir de coyunturas por las que atraviese el proceso electoral. Esto implica estar preparados para contrarrestar ataques de la competencia o para responder a situaciones inesperadas que puedan afectar la imagen del candidato o la campaña.
En resumen, contar con un modelo de atribución del presupuesto nos permite tomar decisiones informadas sobre cómo y dónde invertir los recursos económicos disponibles, maximizando así el impacto de la estrategia de marketing político digital.
Clave 10: Calibración
Lo dije en mi Workshop Claves, Técnicas y Marketing Político practico, que en lo digital todo es medible. Registrarte En el Programa Ahora
En este escenario, es donde las acciones disruptivas de la campaña cobran mayor potencial. Darle valor a los datos es fundamental para alcanzar objetivos que marquen el éxito de nuestra campaña electoral.
Medir para corregir, calibrar para optimizar, mejorar para ganar. Este es el camino que debemos seguir, recordando que detrás de los datos hay personas que sienten, piensan, se emocionan y se entristecen.
Esta montaña rusa emocional modifica el comportamiento digital de los ciudadanos, y medir esto es fundamental. Para medir los datos de manera correcta, debemos crear paneles que nos permitan observar los indicadores clave en tiempo real. Este acceso a la información debe estar disponible para los miembros relevantes del equipo de campaña.
De esta manera, podremos establecer indicadores de medición porcentual claros para alcanzar nuestros resultados.
Siempre es fundamental recordar que, a diferencia del marketing comercial, en el Marketing Político Digital, buscamos conversiones diferentes. La transacción no es económica, es el voto, y este está asociado a elementos más emocionales, incluso de percepción. Debido a esta diferencia en la conversión, siempre debemos establecer métodos que acerquen el posicionamiento de nuestra marca política a la base electoral.
Por lo general, en este punto de la campaña ya estamos utilizando una combinación de medios, escuchando encuestas, midiendo la percepción ciudadana, y con estos datos también podemos calibrar. La calibración comienza desde el primer día y continúa hasta el último de la campaña, ya que la gran ventaja del marketing político digital es que todo ocurre en tiempo real. Esta premisa nos permite corregir a tiempo, mejorar en el momento indicado y desplegar nuestras acciones con contundencia cuando sea necesario.
